lunes, 25 de agosto de 2008

Juegos Clásicos: 2. Final Fight


He puesto en el título Final Fight, pero en realidad quiero hablar de una serie de arcades de Capcom que datan de finales de los 80 o principios de los 90, los denominados beat'em up: Capitán Commando, Cadillacs y Dinosaurios, The Punisher y el mencionado Final Fight. Estos juegos consistían básicamente en ir por la calle dando hostias como panes, sin mediar diálogo alguno.

Y es que yo empecé a jugar a estas cosicas antes de aprender a leer. Eso sí, jugaba entonces igual que ahora, no he mejorado nada. Ya cuando tenía 6 añitos, mis padres empezaron a regentar un bar en el que había máquinas de videojuegos y pude jugar a tiempo completo, como si tuviera una consola más potente que la Super Nintendo.

Recuerdo que el primero de estos juegos que pusieron en las máquinas fué Captain Commando. Se podía elegir entre cuatro personajes: El capitán Commando, era el que mandaba, un agente de la ley que lanzaba fuego y electricidad. Jennety era una momia que daba navajazos. Sho era un ninja (sin más). Y Baby Head era un bebe montado en un robot.



Final Fight es probablemente el más representativo de este grupo, y tenía varias secuelas. Pero el más importante es, sin duda, el primero. Había tres personajes seleccionables: El forzudo Haggar, el carateca Guy y un don nadie, Cody. El juego era probablemete el más dificil del grupo, hasta el punto de que es el único que no llegué a pasarme. Con una monedita de cinco duros, apenas podías llegar a la segunda pantalla, donde aparecían los "Andre el gigante" que eran fuertísimos.



Cadillacs and dinosaurs presentaba una sorprendente novedad: la presencia contínua de dinosaurios, ya fuera para ayudar o para comernos. Además, también había pruebas para ir en coche, armas de fuego y, entre los personajes jugables, se introdujo a una chica. Parece ser que este juego estaba basado en un cómic.



El que realmente estaba basado en un cómic famoso era "The Punisher". El Castigador y Nick Furia hacían equipo para combatir el crimen organizado, hasta el punto de que el "monstruo final" era el Kingpin. En este juego, las armas de fuego cobraron importancia e, incluso, había momentos en los que había que apuntar con una mirilla.



Aparte de que el único objetivo de los protagonistas era recolectar dientes, estos juegos tenían ciertos atributos comunes. Para empezar, el motor gráfico usado en ellos era más o menos el mismo (creo recordar). Todos los personajes tenían una "magia" que se accionaba al pulsar un botón y que hacía mucho daño a los contrarios, pero al mismo tiempo, disminuía la vida propia. Había un número finito de tipos de malos, que aparecían una y otra vez para atacarte. Cuando querían hacer enemigos más fuertes, cambiaban el color de la ropa de unos ya aparecidos y los presentaban como nuevos. Y además, en todos los juegos había pollos escondidos en bidones, ruedas y mierdas de esas, que aumentaban nuestra mermada vida.


Eran, en definitiva, juegos muy divertidos, que estaban muy por encima de lo que podía ofrecer una consola casera y que todos los pordioseros de mi edad pudieron disfrutar. En homenaje a ellos, va este artículo.








No hay comentarios:


Todos los derechos reservados.
Página Principal: Tobas
Mail de contacto: tobasj@gmail.com